Madeline fue el primero de los cinco libros sobre este personaje infantil publicados por el pintor y escritor austro-estadounidense Ludwig Bemelmans entre 1939 y 1961, con una obra póstuma en 1980. Escrito con unas rimas que tienen el aroma y la cadencia de las canciones tradicionales e ilustrado con unas acuarelas amplias, elegantes y de línea simples, con predominio de amarillos y negros y un escenario parisino. La Madeline, denominada así en honor de la mujer del artista, es una de las doce niñas idénticas, de abriguitos y sombreros amarillos, que viven en un internado al cuidado de Miss Clavel. Se nos describe su vida y un pequeño conflicto sobre una apendicitis de Madelaine que concluye con un divertido final. La lejanía de la época y de la forma de vida añade una distancia artística a esta obra que actúa a favor de su lectura, ofrece un sutil atractivo literario, se lee con una sonrisa y deja la impronta de una originalidad que hace que destaque entre la producción actual. El libro se cierra con un listado de los monumentos parisinos que aparecen en sus páginas y una interesante información sobre el autor. Una excelente recuperación de Libros del Zorro Rojo de un personaje que tuvo mucho éxito en su época y que ha pasado a la televisión y el cine con poca fortuna. Una cata antigua de buen degustar para los lectores de hoy.

Teresa Colomer