Hutchins, Pat
Si abrimos las cubiertas de El paseo de Rosalía vemos el paisaje completo de una granja, una gallina caminando y un zorro que anda tras ella. Dibujos a pluma y tinta de líneas geométricas, con rojos combinados con ácidos verdes y amarillos que se mantienen a lo largo del álbum. Empezamos el libro y nos encontramos una sola frase que nos llevará hasta un final circular, simplemente explicándonos que la gallina Rosalía sale a dar un paseo, por aquí y por allá, hasta que retorna al punto de partida. Nada especial. Pero, ah, la ilustración nos cuenta una historia muy diferente: la del zorro que intenta pillarla y fracasa estrepitosamente una y otra vez, sin que, ni el narrador que enuncia la frase, ni la impertérrita gallina que mira siempre al frente, se den cuenta de nada en absoluto. Sólo el lector se parte de risa al sentirse superior cuando anticipa cada acción estratégica del hambriento zorro y constatan su abrupto desastre final. Bien, el realidad no solo el lector. Ranas, pájaros, una cabra y muchas otros bichos que podemos ir descubriendo son testigos o incluso se ven involucrados en las fallidas acciones del zorro. Y, naturalmente, también participan los adultos que compartan esta divertida lectura, propia de unos dibujos animados. Sin duda nos proporcionará un rato de regocijo conjunto y una oportunidad para afinar comentarios y observaciones sobre este fantástico artefacto narrativo visual. Rosalía dispone de otras historias que explotan el mismo molde y se han convertido en clásicos desde su aparición en 1968. No os priváis de compartirlos con los más pequeños.
Teresa Colomer